En junio, el 12, 16 y 25 fueron los días en los que tuvimos reuniones conjuntas, de madres, padres, catequistas y párroco para organizar las celebraciones de primera comunión de este año.
Conocido es por todos que no se celebraron en su tiempo habitual que es Pascua y por eso se van a celebrar a lo largo de los meses de verano, alguna incluso quedará para octubre y otra se esperará al próximo año.
Cada vez que hay que programar las primeras comuniones para los meses de abril, mayo o junio, lo hacemos siguiendo unos criterios. Lo primero que se les explica a las madres y padres es que pueden hacer la primera comunión en cualquiera de las misas que se celebran en la parroquia.
Y se pone un número máximo de familias por tanda, en concreto, no más de 12 familias. Y así lo habitual termina siendo, que se agrupen en 3 o 4 tandas. Pero también ha habido, en contadas ocasiones, niños que la hicieron solos con su familia.
Para la ocasión, no común, que estamos viviendo, se ha limitado el máximo de familias por tanda a 6. Y así han quedado dispersos por los meses de verano. De modo que no solo tendremos distancia social en las celebraciones, sino también distancia temporal. Salvo modificación de última hora, quedan de esta manera: 39 niños de primera comunión en 12 tandas.
